05 de mayo, 2024
Cristina criticó a Fayt por viejo y reveló que Lorenzetti llegó de la mano de Nicolás Fernández
La Presidenta defendió durante una hora la reforma del Consejo de la Magistratura y cuestionó en duros términos a la Corte. Criticó al "casi centenario" Carlos Fayt por mantenerse en el cargo pese a que lo prohíbe la Constitución y recordó el pasado político de los miembros del tribunal: "ningún juez sale de abajo de una baldosa".
Cristina Kirchner defendió hoy la elección popular de los miembros del Consejo de la Magistratura, frenada por múltiples amparos, al afirmar que "ningún juez sale de abajo de una baldosa ni de un repollo" y por tanto es bueno saber "cuáles son sus ideas políticas".
La presidenta habló durante una hora en un acto realizado en la Universidad Tecnológica Nacional de Río Gallegos, e hizo referencia a que "dos importantes miembros de la Corte" participaron de la Convención Constitucional que reformó la Carta Magna en 1994, y que uno de ellos "era miembro de un partido político”.
La jefa de Estado también definió al Consejo de la Magistratura como el "órgano político del Poder Judicial, como también lo es la Corte" y aludió a la presidenta de la organización Justicia Legítima, María Laura Garrigós de Rébori: "Ella dijo que todos (los jueces) vienen de algún lado, que nadie sale de abajo de las baldosas. Me encantó esa expresión".
Después, la mandataria aludió a dos "connotados miembros de la Corte": Raúl Zaffaroni, a quien definió como "excelente académico penalista a nivel internacional" y reseñó que fue convencional constituyente en 1994 por el Frente Grande "con intervenciones magníficas"; y Juan Carlos Maqueda, de quien recordó que fue senador y diputado contemporáneo suyo. "Yo lo voté como miembro de la Corte", dijo Cristina, recordando que en 2002, cuando era senadora por Santa Cruz, aprobó el pliego de Maqueda, que había sido propuesto por el entonces presidente Eduardo Duhalde.
Con respecto a Zaffaroni, señaló: "Hoy es miembro de la Corte y era miembro de un partido político, ¡y eso no está mal!". Al respecto, se preguntó: "¿Qué es esto de que tenemos que tener jueces que no piensan nada?". "A mí me asusta la gente que no tenga nada en la cabeza y no piense en nada. Me asusta mucho. En realidad yo creo que todos piensan algo; lo que pasa es que algunos no pueden decir lo que piensan o lo que creen, que es diferente", afirmó.
La mandataria también aludió que al "propio presidente de la Corte", Ricardo Lorenzetti, de quien recordó que fue propuesto por Néstor Kirchner "sin siquiera conocerlo, ni siquiera de vista". En ese sentido, reveló que "a mí me lo hizo conocer (a Lorenzetti) y me lo presentó en mi despacho un querido amigo, ex senador de esta provincia, porque yo no lo conocía y era muy amigo de él. Me lo presentó en mi despacho para impulsarlo. ¡Y no estaba mal! Porque tenía excelentes antecedentes", dijo en referencia al ex senador Nicolás Fernández, que días atrás cuestionó la reforma.
Luego del acto, la presidenta continuó con sus críticas a los jueces por Twitter y se las tomó con el juez de la Corte Carlos Fayt.
"Cuando mencioné el origen político de algunos integrantes de la Corte Suprema de Justicia, se me olvidó nada más ni nada menos el casi centenario miembro de la Corte, que pertenece al histórico y también centenario Partido Socialista", señaló Cristina. Se refería a Fayt, que tiene 95 años y procede del socialismo.
Luego chicaneó: "¡No puede ser! Si la Constitución Nacional establece un límite de 75 años para ser parte del Alto Tribunal.".
"¿Ven que están mal informados? Por una acordada (decisión que puede tomar por simple mayoría la Corte Suprema), la Constitución, la Ley y lo que diga María Santísima, out”, advirtió. “Dura lex no lex. (El aforismo me pertenece)", concluyó.
La presidenta habló durante una hora en un acto realizado en la Universidad Tecnológica Nacional de Río Gallegos, e hizo referencia a que "dos importantes miembros de la Corte" participaron de la Convención Constitucional que reformó la Carta Magna en 1994, y que uno de ellos "era miembro de un partido político”.
La jefa de Estado también definió al Consejo de la Magistratura como el "órgano político del Poder Judicial, como también lo es la Corte" y aludió a la presidenta de la organización Justicia Legítima, María Laura Garrigós de Rébori: "Ella dijo que todos (los jueces) vienen de algún lado, que nadie sale de abajo de las baldosas. Me encantó esa expresión".
Después, la mandataria aludió a dos "connotados miembros de la Corte": Raúl Zaffaroni, a quien definió como "excelente académico penalista a nivel internacional" y reseñó que fue convencional constituyente en 1994 por el Frente Grande "con intervenciones magníficas"; y Juan Carlos Maqueda, de quien recordó que fue senador y diputado contemporáneo suyo. "Yo lo voté como miembro de la Corte", dijo Cristina, recordando que en 2002, cuando era senadora por Santa Cruz, aprobó el pliego de Maqueda, que había sido propuesto por el entonces presidente Eduardo Duhalde.
Con respecto a Zaffaroni, señaló: "Hoy es miembro de la Corte y era miembro de un partido político, ¡y eso no está mal!". Al respecto, se preguntó: "¿Qué es esto de que tenemos que tener jueces que no piensan nada?". "A mí me asusta la gente que no tenga nada en la cabeza y no piense en nada. Me asusta mucho. En realidad yo creo que todos piensan algo; lo que pasa es que algunos no pueden decir lo que piensan o lo que creen, que es diferente", afirmó.
La mandataria también aludió que al "propio presidente de la Corte", Ricardo Lorenzetti, de quien recordó que fue propuesto por Néstor Kirchner "sin siquiera conocerlo, ni siquiera de vista". En ese sentido, reveló que "a mí me lo hizo conocer (a Lorenzetti) y me lo presentó en mi despacho un querido amigo, ex senador de esta provincia, porque yo no lo conocía y era muy amigo de él. Me lo presentó en mi despacho para impulsarlo. ¡Y no estaba mal! Porque tenía excelentes antecedentes", dijo en referencia al ex senador Nicolás Fernández, que días atrás cuestionó la reforma.
Luego del acto, la presidenta continuó con sus críticas a los jueces por Twitter y se las tomó con el juez de la Corte Carlos Fayt.
"Cuando mencioné el origen político de algunos integrantes de la Corte Suprema de Justicia, se me olvidó nada más ni nada menos el casi centenario miembro de la Corte, que pertenece al histórico y también centenario Partido Socialista", señaló Cristina. Se refería a Fayt, que tiene 95 años y procede del socialismo.
Luego chicaneó: "¡No puede ser! Si la Constitución Nacional establece un límite de 75 años para ser parte del Alto Tribunal.".
"¿Ven que están mal informados? Por una acordada (decisión que puede tomar por simple mayoría la Corte Suprema), la Constitución, la Ley y lo que diga María Santísima, out”, advirtió. “Dura lex no lex. (El aforismo me pertenece)", concluyó.
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Apareció Nicolás Fernández y criticó la reforma judicial de Cristina
El ex legislador de Santa Cruz y mano derecha de la presidenta cuestionó los cambios a la Magistratura. "Estoy en contra de la judicialización de la política y de la politización de la Justicia", se sinceró. Defendió a Ricardo Lorenzetti y le pegó a Cristóbal López.
Y lo que es peor, es una supuesta erudita en derecho y su titulo no aparece por ninguna parte.......
roberto dante
Lanús, Argentina -
La Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial “clariniza” a la Ley de Medios, pero:
Ver a Lanatta nos aclara el concepto que expresa: “Recordemos que la noticia es una “mercancía”.
Mal que le pese a “el periodismo objetivo”, a Obama , a la SIP, a FUNDALEX y a la International Freedom of Expression Exchange (IFEX) es válido reconocer que la noticia es una “mercancía”. Los medios de comunicación impresos, radiales y televisivos se sostienen por los aportes de los Centros de Poder que necesitan difundir como “verdades” sus lineamientos políticos e ideológicos que aportan la “justificación” a sus proyectos económicos., casualmente, siempre en contra de las mayorías populares y a favor de la concentración de la riqueza en pocas manos. Cualquier semejanza con el neoliberalismo es cierta.
El mal llamado “sentido común”, no es otra cosa que una construcción de pensamiento elaborada a partir de la manipulación de la información que conduce a creer en la existencia de una “objetividad” inexistente. Nunca existió el periodismo imparcial y/o neutral. Creerlo es contra natura. Es prioritario trabajar sobre estos a priori inducidos por el establishment mediático. Tomo como ejemplo la durísima oposición neoliberal que enfrentamos en Argentina los que defendemos la nueva “Ley de Medios”.
¿De qué libertad de prensa estarán hablando los periodistas mercenarios? Dicen: “Queremos preguntar”. -- ¿Quién se los impide”.
La experiencia de vida nos enseña que una cualidad humana –muy importante- es la contradicción. El lenguaje es básicamente contradictorio. Con el podemos aclarar pero también oscurecer. Buscar –a ciegas- la verdad y no poder distinguirla de la falsedad. Pero, en este caso, la acción ilumina a las palabras. ¿Por qué?
Porque “no somos lo que decimos, somos lo que hacemos”. El establishment “acciona” a favor de los Grandes Medios Oligopólicos de Comunicación. Bien sabemos que estos Medios “dicen lo que dicen”, pero “NO hacen lo que dicen”. Manipulan la palabra. Nos hablan de “libertades”, “de igualdades”, “de…”, mientras trabajan para los dueños del poder. ¿Los pueblos?
A pesar de la grisura y la impostura de los mensajes mediáticos, se rebelan (accionan); ya no se tragan las letras venenosas aunque partan de una “Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial”.
Tiene ke lavarse kon fluido manchester el KULO Y LA BOKA
A PURO CHORI Y TETRA !